Mensajeros de la Vida - Apóstoles de la eucaristíaSomos una Asociación Cultural “Católica” (por sus fines y la religión de sus miembros) que comenzó su andadura significándose en Defensa de la Vida, frente al aborto que trataban de imponer. El primer paso fue organizar una manifestación contra su legalización. Tuvo lugar en la ciudad de Torrelavega  (Cantabria-España) el 2 de septiembre de 1983, después de una Campaña de sensibilización por la comarca.

En el mitin final el Portavoz se comprometía en la apelación al Rey si no se detenía la marcha contra los niños en el seno materno. Esto se llevó a efecto en mayo de 1985 mediante una compleja Carta Ilustrada dirigida al Rey D. Juan Carlos, patrocinada por nuestra Asociación y firmada por cerca de una veintena de asociaciones interesadas.

Pero la solicitud inscripción en el Registro de Asociaciones del Gobierno Civil de Santander, no fue presentada hasta el 15 de octubre de 1991. La aprobación, con el nº 1539, llegó el 23 de octubre del mismo año.

El artículo 2º, p. 1º de los Estatutos, al referirse a los fines de la Asociación señala: “Promover los valores tradicionales de la Sociedad Española, a la Luz de la Doctrina Católica”. Y esto hace que nuestra Asociación tenga una vocación de Apostolado Seglar.

En nuestra Asociación la dimensión de Apostolado es esencialmente Eucarística; de ahí la paloma que lleva en el pico una espiga. El 12 de octubre de 1984 enviamos una Carta a S.S. Juan Pablo II, para darle a conocer nuestras inquietudes eucarísticas.

En agosto de 1985, la paloma de nuestro anagrama voló hasta casi un centenar de significados obispos de distintos países, con otra Carta que contenía propuestas para una Liturgia basada en el Respeto a Cristo Sacramentado; pretendíamos participar indirectamente en el Congreso Eucarístico de Nairobi (Kenia). Y siguieron luego toda una serie de publicaciones respondiendo al Mensaje de Garabandal: “A la Eucaristía se le da cada vez menos importancia”. En estos tiempos de Apostasía, dicho Mensaje es cada día más urgente y actual; de ahí que continuemos con publicaciones como “En Defensa de la Eucaristía”. Pero con mucho gusto colaboraremos en cualquier iniciativa que redunde a Mayor Gloria de Dios.