Mi primer artículo (17-11-24) era un reconocimiento de la importancia de hacer resonar en el Mundo la Palabra Garabandal, pues encierra un Mensaje urgente para toda la Humanidad. Pero los que dirigen la “Iniciativa de España por Garabandal” no quisieron hacerlo público. No era parroquialmente correcto. Entonces lo envié a otro portal, cumpliéndose que “Nada hay oculto que no llegue a descubrirse” (Lc 12,2). Con este 2º, profundizamos en la verdad sobre Garabandal, comenzando por la situación religiosa actual en esta Parroquia.
Rechazaron mi artículo sin importarles que lo que decía pudiera ser verdad. Movidos por el deseo de no meterse en problemas, perdieron la oportunidad de ejercer la Caridad ayudando a resolverlos. ¿Se creían que Garabandal es una balsa de aceite? ¿Que no acude siempre el Maligno a los pies de la Inmaculada para engañar? (Gen 3,15).
Se hacen paladines de Garabandal pero marginan su Mensaje Escatológico. No imitan a Cristo, que se enfrentó a la jerarquía hipócrita que manipulaba la Ley de Moisés; que no vino a traer la paz según el Mundo (Jn 14,27), sino la Espada (Mt 10,34) que divide y separa: la Verdad y la mentira, la Gracia y el pecado, las herejías y la Sana Doctrina; a los que se aman a sí mismos, de los que aman al único Dios sobre todas las cosas.
Pero la Verdad nos hace libres (Jn 8,32), no esclavos del qué dirán: “Ay si todo el mundo habla bien de vosotros! Eso hicieron…con los falsos profetas” (Lc 6,26). No son libres, entonces, los pazguatos imitadores del avestruz, los unidos por el silencio de los cementerios, los cobardes que se lavan las manos (Mt 27,24).
Me reafirmo en que nadie tiene el monopolio del Espíritu Santo; por eso es injusto que alguien pretenda obligar a que acepten sus opiniones sobre la Palabra de Dios y las Apariciones, como si fueran únicas y perfectas. No juzgo la conciencia del Párroco, sino sus palabras dichas en público y sus actitudes pontificales. Pero debo cumplir el mandato de la Corrección Fraterna (Lv 19,17); y públicamente (1Tim 5,20) porque de ese modo se ha manifestado -una y otra vez- la injusticia y el error, y después del infructuoso intento para que hiciera de Juez el Obispo (1Cor 6,5).
Creo que, en su obsesión por alejar del Templo a quienes no piensan como él, D. Rolando cree “que hace un bien a Dios” (Jn 16,2); pero abramos los ojos, porque es uno de los signos que anteceden a la 2ª Venida de Cristo, junto con la Apostasía (Lc 18,8) de los pastores (Garabandal, 18-6-1965).
>Es verdad que ha hecho obras en el templo: calefacción, nuevas campanas con los mensajes de las Apariciones y el nombre del Párroco 3 veces grabado en ellas, ha colocado detrás de la Iglesia una Virgen del Carmen con placa en la que de nuevo aparece su nombre, iluminación exterior, reclinatorios para la Comunión, … “Probablemente yo soy quien más ha hecho por Garabandal”, dijo en una ocasión.
>Es verdad que -acabada una Vigilia Pascual- en tono solemne, nos dijo: “Hoy yo entrego las Apariciones de Garabandal al pueblo de Garabandal”. Desde entonces, con cierta frecuencia ha insistido en sus homilías: “Los del Pueblo no permitáis que os roben las Apariciones. Cuidad con los que se aposentan aquí porque podrían llegar a dirigir el Pueblo” (nov-dic 2022). “Ustedes son dueños y señores de Garabandal” (20/1/2023). Pero las Apariciones son de la Virgen, no del Párroco.
>Es verdad que lleva un tiempo diciendo en sus homilías y en algún vídeo que circula por la red, que hay 3 garabandales: los vecinos del Pueblo, los que se han afincado en él, y los peregrinos. Con esta clasificación, el Párroco divide y enfrenta a los devotos, y se queda corto en el número. Siguiendo su estilo habría un 4º Garabandal: el predicado por él, que se sitúa por encima de las Apariciones, de las videntes y del Pueblo. Él ha sido capaz de acuñar una nueva Virgen de Garabandal, Madre de la Eucaristía y de la Conversión, que nunca vieron ni oyeron las niñas, ni aparece en ningún relato ni crónica de las Apariciones. No se conoce una manipulación tal en ninguna mariofanía del Mundo.
>Es verdad que con la llegada de este Párroco a Garabandal han perdido libertad:
–Los sacerdotes, a los que obliga a concelebrar a su lado y escucharle, con lo que no pueden vivir la Misa como ellos desearían, solos o con los grupos que traen. Tampoco permite Misas en Latín.
-Los peregrinos y fieles que no le aplauden, y no tienen oportunidad para escuchar otra Misa, en la que no se sientan juzgados y condenados; también los peregrinos que no llegan a la única Misa diaria (11 am).
>Es verdad que la mayoría de peregrinos desconoce los problemas, y quedan embobados al escuchar en sus homilías, una retahíla de palabras biensonantes que no definen nada. A otros les resultan homilías intrigantes, en las que parece predicarse a sí mismo: ¡Cuidado con quién habláis! Cuidado con los salteadores de caminos. Hay gente en el Pueblo que habla mal de mí, que me persigue. Se van a otras Misas “buscando gasolina más barata” porque les molestan en su conciencia las verdades que digo”. “Algunos me escriben cosas y las dejan sobre el altar o por debajo de la puerta de la sacristía, pero yo las rompo”. Hay que venir a Garabandal, pero sin espectáculos folclóricos (¿El Rosario de los sábados en los Pinos?) Hay quienes rezan la Coronilla de la Misericordia o llevan en la mano el Rosario, pero en su corazón son unos hipócritas. Los hay aquí cismáticos, que no están en comunión con el Papa; etc. etc.
>Es verdad que lo que él llama críticas a su persona son, principalmente, los lamentos de quienes él azota con su lengua.
>Es verdad que me he dirigido a los Obispos diocesanos en distintos momentos: A Mons. Vicente Jiménez Zamora (27-5-2012); con otros vecinos, a Mons. Manuel Sánchez Monge (2-6-2016); por último, a Mons. Arturo P. Ros (14-10-24). Ninguno de ellos ha puesto remedio: han callado; si lo hubieran hecho, este artículo no se habría redactado; tampoco si la “Iniciativa” hubiera publicado el 1º.
>Es verdad que el Párroco habla con peregrinos -sacerdotes y fieles- para difamar y calumniar, incluso a demonizar, a familias y personas como el que esto suscribe; pero entre ellos tenemos a muchos amigos, que luego vienen a contárnoslo y nos dejan su testimonio escrito y firmado. Si continúa esta dinámica tendremos que usarlos.
Perdonamos una y otra vez, y buscamos el diálogo; pero él lo rechaza “porque no me da la gana”, “porque es usted una persona conflictiva”. En realidad, se cree que todo lo hace bien, que sus pensamientos son mensajes divinos. Su conducta nos parece la propia de un psicópata, con una doble personalidad y un temperamento colérico. Repetimos: no juzgamos su conciencia Creemos que está enfermo. Pedimos oraciones por él. Ojalá algún día sane y podamos darnos un abrazo.
>Es verdad que, con frecuencia, el Párroco advierte a los peregrinos para que vengan en silencio interior y exterior, y que no hablen sino con él. No se da cuenta de lo que hace, porque esa actitud:
–Le enfrenta a la Palabra de Dios que nos ordena: “Enseñaos y exhortaos unos a otros, con toda sabiduría” (Col 3,16). “No te avergüences de decir la Verdad” (Eco. 4,24).
–Le enfrenta a la Iglesia, que otorga a los fieles el derecho e incluso, a veces, el deber de “dar su opinión sobre lo que se refiere al bien de la Iglesia” (LG 37; Canon 212.3)
Luego no se está contra la Iglesia al compartir opiniones sobre lo que dice un párroco, o ante lo que sale de la boca del Obispo de Roma. Pues bien, vamos a ejercer ese Derecho:
>Francisco ha dicho (Y hecho. Sólo algunos ejemplos):
-“El proselitismo es una solemne tontería. No tiene sentido” (La República, 1-10-2013).
-Que existe un “abanico de religiones” y que “todos somos hijos de Dios (7-1-2016).
-“El pluralismo y la diversidad de religión, color, sexo, raza y lengua son expresión de una sabia Voluntad Divina, con la que Dios creó a los seres humanos” (Abu Dabi, 4-2-2019).
-No le ha importado celebrar con toda pompa la figura del heresiarca Lutero (31-10-2017), ni entronizar el ídolo Pachamama en el Vaticano (4-10-2019).
-“Todas las religiones son un camino para llegar a Dios”. “Cada religión es un lenguaje para llegar a Dios” (Singapur, 11-9-2024).
– “Religiones unidas para una Humanidad mejor”.- Fue el lema de una reunión en el Vaticano. Francisco lo alabó porque “apoyándose en sus rasgos comunes, las religiones pueden “caminar y trabajar juntas por una Humanidad mejor,… permaneciendo cada uno firmemente afirmado en sus propias creencias y convicciones religiosas” (Vaticano, 30-11-2024)
>Jesucristo dice:
-“Id por todo el Mundo y predicad el Evangelio A TODA CRIATURA. El que creyere y fuere bautizado se salvará. El que no creyere se condenará” (Mc 16,15-20). “Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. NADIE va al Padre si no es por medio de Mí” (Jn 14,6). “Yo soy la Puerta. El que entre por Mí se salvará” (Jn 10,9). “Yo soy la Luz del Mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la Luz de la Vida”(Jn 8,12). Jesús es “Luz para alumbrar a las naciones” (Lc 2,32). “Sin Mí NADA podéis hacer” (Jn 15,5).
“El que no tiene al Hijo de Dios, tampoco tiene la Vida (eterna)”(1Jn 5,12)
–En ningún otro se halla salvación, porque no hay otro Nombre, bajo el Cielo, dado a los hombres, en el cual podamos ser salvos” (Hech 4,12)
-“Todo espíritu que no confiese a Jesús, ese no es de Dios; es del Anticristo” (1Jn 4,3).
Está claro que el Obispo de Roma contradice a Cristo; no cree que la Biblia sea la única Palabra del Único Dios (Dt 6,4-7). Si Cristo es la Luz del Mundo, el Mundo sin Él está en las tinieblas del pecado y del Maligno. Francisco pretende unirse con los que defienden otras palabras, publicadas por “falsos profetas” que hablan en nombre de otros dioses, que no pueden ser sino demonios (1Cor 10,20). Y “no se puede beber del Cáliz del Señor y de la copa de los demonios” (1Cor 10,21). Francisco rechaza a Cristo y al que le envió (Lc 10,16); encarna, pues, con toda evidencia, la figura del Falso Profeta (Ap 13,11-17) de los Últimos Tiempos; y se enfrenta al Magisterio de 2000 años de Iglesia, pero no vamos a tratarlo aquí.
Está cumpliéndose lo que vio la Beata AC Emmerich. Subrayen lo que más les impresione:
“Vi…a la Iglesia Tenebrosa que se degradaba (AAIII,156). Se formó un cuerpo, una comunidad fuera del Cuerpo de Jesús que es la Iglesia: una falsa Iglesia sin Redentor, … sin Salvador, con las pretendidas buenas obras sin la Fe, la comunión de los incrédulos teniendo la apariencia de virtud; en una palabra, la anti-Iglesia cuyo centro está ocupado por la malicia, el error, la mentira, la hipocresía, la laxitud, los artificios de todos los demonios de la época (AA.II.89).
¡Basta, pues, ya de rodeos y paños calientes! Cristo dice: “Quien no está conmigo está contra Mí” (Mt 12,30). Luego son anticristos aquellos que hermanan a todos los fundadores religiosos, pues sitúan a Jesús entre ladrones y salteadores (Jn 10,8), lo igualan “a los malhechores” (Is 53,9); es más, clasifican al Dios de Jesús entre los demonios de los gentiles (1Cor 10,20). ¿No será esto una blasfemia contra el Espíritu Santo, que no tiene perdón? (Mt 12,32). ¡Despertemos de una vez! “Si alguien viene a predicaros un Evangelio distinto del que habéis recibido, sea anatema” (Gal 1,9).
En 1965 “la Copa” de la Justicia Divina estaba rebosando. ¿No se está ya desbordando? ¿Es posible que no se comprenda todavía el Mensaje de Garabandal? “Ya sólo quedan 3-4 Papas y luego el Final de los Tiempos. Cardenales, obispos y sacerdotes van muchos por el camino de la perdición, y con ellos llevan a muchas más almas”. ¿No son ellos los responsables de que el Impostor haya ocupado la Silla de Pedro? ¿No son culpables de la actual Apostasía?
Animo a los verdaderos devotos de Garabandal a defender las Apariciones en toda su crudeza; por serlo, fueron perseguidas desde el principio. Si hoy surgen iniciativas que cosechan aplausos, pero no son “signo de contradicción” (Lc 2,34) es que no están haciendo las cosas bien; quizás sin darse cuenta, están manipulando las Apariciones. El que esto suscribe no participará en esa simulación. Animo a los valientes a ser “Iniciativa por toda la Verdad de Garabandal”, guiándonos por la Palabra de Dios que nos alienta: “Combate por la Justicia hasta la muerte, porque Dios peleará por ti contra tus enemigos” (Eco. 4,33).
Alejandro Jiménez Alonso, AMDG VM (2-2-2025)
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